viernes, 19 de octubre de 2012

Comidas Tradicionales de Oaxaca

Platillos típicos: Mole negro, Mole rojo, Mole coloradito, Mole almendrado, Mole chichilo, Mole amarillo, Hígados de pollo estilo Oaxaca, Tasajo, Pozole mixteco, Cecina, Caldo de gato, Chapulines, Tlayudas, Caldo de garbanzo, Salchichas oaxaqueñas, Arroz chepil, Caldillo de vigilia, Chiles rellenos de sardinas, Salsa de chiles serranos, Salsa de hormiga chicatana, Tamales de chepil, Tamales de pescado del Istmo, Chiles de agua rellenos de quesillo, Chiles pasilla rellenos de picadillo, Chileajo, Chacales al ajillo, Calamares en su tinta, Hojaldre de cazón, Chichilo, Salsa de gusanito, Guiso de iguana, Armadillo guisado, Escabeche de pulpo, Caldo de nopales, Empanadas de amarillo crudo de Ocotlán. Postres típicos: Nicoatole, Leche quemada, Buñuelos, Nieve de tuna y leche quemada, Pan de yema con chocolate, y toda la variedad de dulces regionales (nenguanitos, marquesote, Rosca de yema, empanadas de lechecilla, cocadas, mamones, etc.) Bebidas típicas: Mezcales, el Chocolate-atole, el Champurrado, atole de panela, Aguas frescas, Agua de chilcayota, Tejate. Oaxaca ofrece a los visitantes una de las manifestaciones culturales mas arraigadas y más vivas: La Gastronomía. La cocina oaxaqueña es una de las más completas de todo el país por su variedad, su riqueza, imaginación y su complejidad. El quesillo oaxaqueño es sin duda, el producto elaborado más popularizado nacionalmente. Se le ha tratado de imitar comercialmente pero, como los grandes quesos y los buenos vinos, solamente su rígido proceso artesanal asegura su delicadeza. Una auténtica quesadilla con asadero de Oaxaca, consiste en una tortilla de maíz en la que se ha colocado un trozo de quesillo, una ramita de epazote y un poquito de chile verde, para ponerla en el fuego y aguardar que éste obre la transfiguración del quesillo. Desde tiempos inmemoriales los habitantes de Oaxaca encontraron que antes que permitir que los chapulines devastaran sus campos, lo mejor era devastarlos a ellos, y desde entonces lograron capturarlos por arrobas y darles una buena purga con yerbas olorosas, tras lo cual, al horno. Quien no ha puesto en su boca un puñado de chapulines no conoce uno de los placeres más exóticos y gentiles al paladar... y al alma.Este hermoso estado de la República Mexicana ofrece a sus visitantes una diversidad enorme de platillos. La gastronomía oaxaqueña, reconocida en México y en el mundo, ha tenido como principales aliados al clima y las tradiciones; lo primero hace posible la existencia de productos vegetales y animales que sirven de base para la comida, y lo segundo explica las diversas formas utilizadas en su preparación.Llegar a Oaxaca significa entrar a un mundo extraordinario por el abanico de posibilidades que ofrece aun para aquellos de paladar exigente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario